La historia de Yunus, la paz sea con él: En el vientre de la ballena Una lección sobre el arrepentimiento, la penitencia y la fe en Dios

En los anales de los profetas, la historia de Yunus (la paz sea conél), conocido como«Dhul Nun» (el dueño de la ballena), es una de las más impactantes e instructivas. Es una historia que encarna el hecho de que los profetas son seres humanos que cometen errores, que la misericordia de Dios se extiende a todo y que la puerta del arrepentimiento y la penitencia está siempre abierta para todos aquellos que se vuelven sinceramente hacia Él. Desde la gran angustia en las profundidades del mar hasta el alivio increíble, la historia de Yunus es un recordatorio constante de la importancia de admitir los propios errores, la persistencia en la súplica y la certeza de que no hay refugio ni escapatoria de Dios salvo a través de Él.
La llamada de Jonás: El pueblo de Nínive y la partida en cólera
Dios envió a Yunus, la paz sea con él, a su pueblo de la ciudad de Nínive, en Irak, para que les llamara a adorar sólo a Dios y a abandonar el politeísmo. Yunus les llamó durante mucho tiempo, pero su pueblo no le creyó, le desobedeció y persistió en su politeísmo. Yunus desesperó de su fe, se enfadó con ellos y pensó que su pueblo nunca creería y que su misión había terminado con ellos.
En un momento de angustia y cólera, Yunus, la paz sea con él, abandonó a su pueblo sin esperar la orden explícita de Dios de marcharse, ni a que Dios le informara de que ninguno de ellos creería. Cometió el error de pensar que el asunto se había resuelto y que el tormento descendería sobre ellos.
Evidencia: El Sagrado Corán menciona esta salida no autorizada en sus palabras:
وَذَا النُّونِ إِذ ذَّهَبَ مُغَاضِبًا فَظَنَّ أَن لَّن نَّقْدِرَ عَلَيْهِ
(Surat al-Anbiya: 87).
Es decir, pensó que no le acosaríamos ni le penalizaríamos por lo que hizo.
En el barco: Sorteo y encuentro con la ballena
Tras abandonar a su pueblo, Yunus (la paz sea con él) se embarcó en un navío en alta mar. Cuando el barco navegaba en alta mar, estalló una fuerte tormenta que estuvo a punto de hundirlo. Los pasajeros del barco dijeron «Hay un esclavo entre nosotros que ha huido de su Señor, y debemos arrojarlo al mar para salvar el barco». Decidieron echar a suertes quién era esa persona.
Se echó a suertes y cayó sobre Yunus, la paz sea con él. Volvieron a repetirlo, y cayó sobre él. Lo repitieron por tercera vez, y también cayó sobre él. Yunus comprendió que ése era el destino de Dios, y que lo que le ocurría se debía a sus actos. A pesar de su condición de profeta, no rechazó el destino de Dios, sino que se arrojó al mar.
Pruebas: El Corán menciona este acontecimiento en Surat al-Safat:
فَسَاهَمَ فَكَانَ مِنَ الْمُدْحَضِينَ (141) فَالْتَقَمَهُ الْحُوتُ وَهُوَ مُلِيمٌ (142)
(Surat al-Safat: 141-142).
«Los derrotados» significa: los que son derrotados en la lotería, y «culpado» significa: el hacedor de lo que es culpado.
La gran ballena se lo tragó por orden de Dios, y se lo tragó.
En el vientre de la ballena Tres Tinieblas y una Gran Oración
Yunus (la paz sea con él) se encontró en una oscuridad superpuesta: La oscuridad del vientre de la ballena, la oscuridad de las profundidades marinas y la oscuridad de la noche. En esta angustia extrema, soledad absoluta y situación imposible para la supervivencia, Yunus se dio cuenta plenamente de que había pecado contra su Señor y de que no le quedaba otro recurso que recurrir a Él.
En esta oscuridad, Yunus suplicó a su Señor y Le invocó en una gran oración, una de las mayores oraciones por la angustia y la aflicción, una oración llena de monoteísmo puro, confesión de culpa y alabanza a Dios.
Evidencia: El Todopoderoso dijo en Surat al-Anbiya:
وَذَا النُّونِ إِذ ذَّهَبَ مُغَاضِبًا فَظَنَّ أَن لَّن نَّقْدِرَ عَلَيْهِ فَنَادَىٰ فِي الظُّلُمَاتِ أَن لَّا إِلَٰهَ إِلَّا أَنتَ سُبْحَانَكَ إِنِّي كُنتُ مِنَ الظَّالِمِينَ
(Surat al-Anbiya: 87).
Esta oración era un arrepentimiento sincero, un remordimiento sincero, un reconocimiento de la unicidad de Dios, una confesión de culpa y una limpieza de Dios de toda imperfección. Jonás siguió alabando a Dios en el vientre de la ballena.
Evidencia: El Todopoderoso dijo en Surat al-Safat:
فَلَوْلَا أَنَّهُ كَانَ مِنَ الْمُسَبِّحِينَ (143) لَلَبِثَ فِي بَطْنِهِ إِلَىٰ يَوْمِ يُبْعَثُونَ (144)
(Surat al-Safat: 143-144).
Este versículo muestra que la continua alabanza y súplica de Jonás fue la razón por la que se salvó de perecer en el vientre de la ballena.
Sobrevivir y volver a su pueblo: Gracia y perdón
Dios Todopoderoso respondió a la plegaria de Yunus, la paz sea con él, y ordenó a la ballena que lo arrojara a la orilla del mar. Yunus fue arrojado a la orilla del mar, estaba débil y enfermizo, pero sobrevivió por un milagro divino.
Evidencia: El Todopoderoso dijo en Surat al-Safat:
فَنَبَذْنَاهُ بِالْعَرَاءِ وَهُوَ سَقِيمٌ (145) وَأَنبَتْنَا عَلَيْهِ شَجَرَةً مِّن يَقْطِينٍ (146)
(Surat al-Safat: 145-146).
Gracias a la misericordia de Dios, plantó un árbol de calabaza para que le diera sombra del sol y le alimentara con sus frutos. Cuando se recuperó, Dios le devolvió a su pueblo.
He aquí otro milagro. Mientras Jonás estaba en el vientre de la ballena, el tormento descendió sobre su pueblo, que vio sus signos y se dio cuenta de que había mentido a su profeta. Todos se arrepintieron ante Dios y salieron al desierto, rezando, llorando y pidiendo perdón. Cuando Dios vio la sinceridad de su arrepentimiento, les quitó el tormento.
Evidencia: El Todopoderoso dijo en la Surah Yunus:
فَلَوْلَا كَانَتْ قَرْيَةٌ آمَنَتْ فَنَفَعَهَا إِيمَانُهَا إِلَّا قَوْمَ يُونُسَ لَمَّا آمَنُوا كَشَفْنَا عَنْهُم عَذَابَ الْخِزْيِ فِي الْحَيَاةِ الدُّنْيَا وَمَتَّعْنَاهُمْ إِلَىٰ حِينٍ
(Surah Yunus: 98).
Yunus volvió a ellos y comprobó que su pueblo había creído. Se alegró de su fe y siguió llamándoles y guiándoles.
Epílogo: Grandes lecciones de arrepentimiento y certeza
La historia de Yunus (la paz sea con él ) es una de las más grandes historias que enseña a los musulmanes lecciones inolvidables:
- La importancia del arrepentimiento y del arrepentimiento: Por grande que sea el pecado o el error, la puerta del arrepentimiento siempre está abierta, y Dios acepta el arrepentimiento de Sus siervos. La oración de Yunus: «No hay más dios que Tú, glorificado seas, yo era uno de los injustos» es la clave del alivio para toda persona afligida.
- La certeza de la capacidad y la misericordia de Dios: Incluso en las tinieblas más oscuras y en la desesperación, la alegría aparece de la nada, porque Dios es capaz de hacer todas las cosas, y Su misericordia es inmensa.
- No desesperes de la misericordia de Dios: Aunque una persona piense que no tiene salida, la misericordia y la ayuda de Dios están más cerca de ella de lo que cree.
- Las consecuencias de precipitarse y no autorizar plenamente: El relato nos enseña que los profetas son seres humanos que cometen errores, y que precipitarse en los juicios o tomar decisiones sin una orden divina explícita puede acarrear consecuencias.
- El valor de la alabanza y el recuerdo: El Tasbeeh fue la razón de la supervivencia de Yunus, y es la prueba de que el recuerdo y la súplica constantes pueden salvarnos del peligro.
- La misericordia de Dios es inmensa: Dios quita el castigo a las naciones si se arrepienten sinceramente, y esto abre la puerta de la esperanza a todos los pecadores.
La historia de Yunus (la paz sea con él) es un testimonio vivo de que el camino de vuelta a Dios siempre es fácil, de que el arrepentimiento sincero, la súplica sincera y la convicción firme son las claves para escapar de toda angustia, y de que Dios es demasiado misericordioso para abandonar a Sus siervos si se vuelven a Él.
¿Cuál es la lección más importante que te ha dejado la historia de Jonás después de leerla con tanto detalle?